Cuánto cobrar por los distintos servicios de traducción es una de las cosas que más genera incertidumbre cuando estamos comenzando nuestra carrera profesional o cuando nos reinsertamos en el mercado. Muchas veces, se piensa que la tarifa de traducción tiene que ser por palabra, pero, en realidad, primero tenemos que conocer nuestra tarifa por hora.

Algunos aspectos que debemos tener en cuenta a la hora de calcular nuestra tarifa de traducción son los siguientes:

  • Tiempo de trabajo

Si nos piden un presupuesto, no podemos dar una tarifa de traducción por palabra sin considerar el tiempo que nos va a llevar hacer el trabajo. Para eso, hay que revisar el documento antes de dar el presupuesto.

Lo mejor es tener un rango definido, con una tarifa mínima (que es lo mínimo que estamos dispuestas a cobrar por un trabajo), una tarifa intermedia y una tarifa ideal.

En el caso de las traducciones, la complejidad del texto y el formato del documento pueden hacer que una traducción con la misma cantidad de palabras que otra nos lleve el doble de tiempo. Por este motivo, el nivel de dificultad y el tipo de formato también influyen en cuánto le vamos a cobrar a un cliente.

  • Formación, capacitaciones y especialización

En la tarifa debemos incluir nuestra formación y los años de estudio, que se traducen en conocimiento. No cobramos lo mismo si tenemos un título de grado que si tenemos una maestría. Lo mismo ocurre con las capacitaciones que hacemos y las certificaciones que tenemos. Mientras más nos especialicemos en un área, mejores seremos traduciendo, por ende, cobraremos más.

  • Años de experiencia

Con el tiempo, ganaremos más experiencia y nos desenvolveremos mejor ante ciertos desafíos, y eso se refleja, usualmente, en la calidad de nuestro trabajo. Por lo tanto, mientras más experiencia tengamos, más cobraremos. De esta forma, no mantendremos la misma tarifa cuando recién empezamos que cuando tenemos cinco o diez años de experiencia.

Sin embargo, esto no significa que tenemos que cobrar poco o menos que las tarifas estándar del mercado o sugeridas por asociaciones y colegios por no tener experiencia. Mientras menos cobremos al empezar, más nos va a costar subir la tarifa después.

  • Tarifas mínimas sugeridas y estándar del mercado

Las asociaciones profesionales y los colegios de traductores suelen bridar tarifas mínimas orientativas. Estas tarifas y las tarifas estándar que se manejan en el mercado también nos pueden orientar a la hora de definir nuestra tarifa para que no sea bastante menor que lo sugerido.

  • Tipo de cliente

Como vimos antes, lo ideal es tener un rango de tarifa para cada servicio que brindamos, ya que la tarifa que cobramos varía según distintos factores. Uno de estos factores es el tipo del cliente. Por ejemplo, la tarifa de traducción por palabra cambia según si el cliente es un particular, una agencia de traducción o un cliente corporativo.

  • Situación personal

Para calcular tu tarifa de traducción y otros servicios, es fundamental primero conocer tus finanzas y saber cuánto dinero necesitás por mes para cubrir tus gastos. Por lo general, cuando comenzamos tenemos pocos gastos si aún vivimos con nuestra familia. A medida que nos independizamos, tendremos más gastos que habrá que contemplar en la tarifa.

Para calcular tu tarifa según tus gastos, podés hacer el siguiente ejercicio.

  1. Sumá todos los gastos que tenés por mes (por ejemplo, alquiler, servicios, impuestos, alimentos, monotributo, obra social, salidas, ahorros, suscripciones, etc.).
  1. Mutiplicá esa cifra por 12. Al resultado sumale todos los gastos que tenés en un año y que no son mensuales (como vacaciones, eventos profesionales, capacitaciones, etc.). Estos son tus gastos anuales.
  1. Definí cuántas semanas querés trabajar por año. Para eso, restá 52 (la cantidad de semanas que tiene un año) menos la cantidad de semanas que no trabajás (incluidos los feriados, los días de capacitación, las vacaciones, etc.). Esto sirve para poder hacer suficiente dinero el resto del año y así cubrir los días en los que no trabajás.
  1. Dividí la cifra que te dio en el punto 2 por la cantidad de semanas que querés trabajar. Este es el ingreso que deberías generar por semana trabajada.
  1. Definí la cantidad de horas por semana que estimás tener trabajo remunerado (como traducir, revisar, subtitular, etc.). Las personas freelance hacemos mucho trabajo no remunerado, como capacitarnos, buscar clientes, interactuar con colegas en LinkedIn u otras redes sociales, etc.
  1. Dividí la cifra del punto 4 por la cantidad de horas estimativas de trabajo remunerado. Esta es tu tarifa estimativa por hora. A partir de tu tarifa por hora y según la velocidad con la que trabajes, podés definir tu tarifa por palabra, en el caso de la traducción, para cubrir todos tus gastos. La tarifa por hora también te va a servir para cotizar otros proyectos que no sean de traducción y se cobren por hora, por ejemplo, de revisión.

Veamos un ejemplo para que sea más fácil. Supongamos que una traductora tiene 1000 USD de gastos por mes.

1000 x 12 = 12.000

Supongamos que la traductora tiene unos 4000 USD de gastos extra por año no contemplados en sus gastos mensuales. Entonces la traductora tiene 16.000 USD de gastos anuales. Si la traductora se toma 4 semanas de vacaciones por año, trabaja 48 semanas al año.

16.000 / 48 = 333,33

333,33 USD es la cifra que la traductora debe ganar por semana trabajada para cubrir todos sus gastos mensuales y anuales. Supongamos que la traductora estima hacer 25 horas por semana de trabajo remunerado.

333,33 / 25 = 13,33

En este ejemplo, esta traductora tendría que cobrar alrededor de 14 USD la hora como mínimo para cubrir sus gastos y necesidades. Si la traductora tradujera 250 palabras por hora, su tarifa de traducción sería de 0,06 USD como mínimo.

Hacer este ejercicio te da simplemente una estimación aproximada de tus gastos y tu tarifa mínima. A partir de tus gastos según tu situación y teniendo en cuenta los otros aspectos que hemos visto, como la experiencia y el tipo de cliente, podés definir tu rango de tarifa. Obviamente, los cálculos van a ir cambiando con el tiempo, por lo que es un ejercicio que podemos repetir todos los años o varias veces al año.

Si tu tarifa actual por hora difiere mucho de la tarifa por hora que te da en el ejercicio, no te frustres. Ahora tenés información basada en tus propios datos que te va a ayudar a llegar a esa cifra. Lo primero es tener el conocimiento para cobrar de forma consciente por nuestro trabajo, en vez de simplemente cobrar una tarifa porque es lo recomendado por colegas o asociaciones.

La tarifa por palabra es simplemente una forma de cotizar nuestro trabajo. Esto no significa que tenemos que trabajar más para ganar más. Es igual de importante trabajar de forma eficiente y más rápido (lo que se gana con la experiencia y al especializarse) y trabajar con cierto tipo de clientes y proyectos.

Para conocer más sobre números reales en pesos argentinos, en pesos uruguayos y en dólares, armado de presupuestos y negociación con clientes, te invito a ver el Taller de tarifas para traductores.

Paula Plazas

Autora Paula Plazas

Comparto información y recursos para ayudar a traductores a impulsar su carrera en la traducción y darle más valor a su trabajo.

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